miércoles, 28 de julio de 2010
Ahora que este vacío me devora, ni mi propia existencia es justificante de mis deseos; el humo de mis pensamientos torna color púrpura con la única intención de confundirme. Las risas se vuelven cursivas ante la embriaguez de los recuerdos asesinos; y el llanto pasa a ser un visitante efímero, pero demasiado habitual en las batallas nocturnas. Quizás algún día la utopía que alimenta mis sentidos termine por extinguirse, y no me nuble la vista con cada parpadeo; quizás… que ingenua.
martes, 27 de julio de 2010
Sabes?Algún día lo lograré. Llegaré tan alto que no podrás verme; practicamente invisible, inexistente. Estaré tan lejos que cesarán tus gritos; se parará todo y tan solo estaré yo. Yo y todo lo que significo. Yo y todo mi ser; lo que he vivido, lo que he sentido... Tan solo estaré yo; y ni yo tendré sentido.
lunes, 19 de julio de 2010
Llevaba tiempo sin querer escribir, y sin poder evitar hacerlo… aterrada ante la idea de enfrentarme a mis pensamientos; a este terrible pánico de haberme vuelto loca a fuerza de caricias…sabiendo que la guerra era inminente.
Yo, ansiosa por no despertar de este sueño de verano, no hago más que cerrarle puertas al mar..
Yo, ansiosa por no despertar de este sueño de verano, no hago más que cerrarle puertas al mar..
martes, 6 de julio de 2010
Hoy he vuelto a prometerme que voy a dejar de engañarme; es más, lo juro. No sé porque lo hago, no es más que otro vicio estúpido como fumar, beber o amar. Carece de sentido y solo me aporta una morfina instantánea; que no dura apenas un parpadeo, y me devuelve a la realidad estrellándome contra el suelo.
No solo voy a dejar de engañarme, sino de engañar, de mentir y falsificar mis miradas; estoy cansada y no sé sonreírte con los ojos. No sé cómo se finge una sonrisa, ni cómo hacer para no clavarme astillas toque lo que toque. No voy a decir que me da igual, porque estoy absurda con armadura; asique, pégame un tiro.
No solo voy a dejar de engañarme, sino de engañar, de mentir y falsificar mis miradas; estoy cansada y no sé sonreírte con los ojos. No sé cómo se finge una sonrisa, ni cómo hacer para no clavarme astillas toque lo que toque. No voy a decir que me da igual, porque estoy absurda con armadura; asique, pégame un tiro.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)