lunes, 20 de diciembre de 2010

Los recuerdos se agolpan en mis manos;
tras haber sido el único en surcar mi séptimo cielo,
te recuerdo.
Cual volcán enfurecido por el magma de los celos,
y sin embargo; mar.
Y sin embargo; tus dedos recorriendo el horizonte del paraíso por el Egeo.
No vale de nada engañarse,
el primero en luchar contra los infiernos
tiene guardado el cielo de los recuerdos.

1 comentario:

A.cid dijo...

Es brutal. Y lo sabes.